Mediante la combinación de datos de excitabilidad y conectividad, los investigadores han desarrollado un biomarcador que permite predecir los resultados quirúrgicos en niños con epilepsia farmacorresistente (EFR).
“En niños con EFR, identificar la zona epileptógena en el cerebro puede constituir un reto incluso si se utiliza la EEG intracraneal”, según la Dra. Eleonora Tamilia y sus colaboradores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard (Harvard Medical School), Cambridge, Massachusetts (EE. UU.).
“Dado que la epileptogenicidad es una propiedad compleja que depende de la interacción entre excitabilidad y conectividad, el biomarcador ideal debe tener en cuenta ambos aspectos”.